Las personas conocemos nuestro cuerpo mejor que nadie y cómo reacciona ante diferentes situaciones. Sin embargo, con el envejecimiento o después de los ingresos hospitalarios en los que seguramente nos han practicado diversas técnicas diagnósticas o terapéuticas o incluso intervenciones quirúrgicas, la percepción de nuestro cuerpo puede cambiar y vamos a tener dificultad para valorar lo que es o no normal.
Si te sientes inseguro y no te ves capaz de valorar adecuadamente tu situación, es bueno que delegues en otra persona y la mantengas informada.
Los síntomas y los signos que te exponemos a continuación, podrían indicar que algo en tu cuerpo no funciona bien y sugerir que hay alguna complicación. No significa que si aparecen obligadamente vaya a haber un problema grave, pero sí nos indican que es conveniente que seas valorado por un profesional sanitario.